miércoles, 25 de agosto de 2010

Cambiaré de vida

Triste, como un perro en la autopista, como una tortuga con prisas, con una monja en un burdel. Solo, como cuando tu te fuiste, como cuando no te rozan unos labios de mujer. Hoy me he vuelto a ver absurdo como un domingo por la tarde, como las balas por el aire, como el puto despertador. Inutil, como los besos que no diste, como un cuerpo que se viste cuando me desnudo yo.
Como un borracho en el desierto, como una princesa en el metro, como un reo sin voz, como una navidad sin techo, como un delfín en el mar muerto, como la lagrima que moja tu colchón. Vacío, como el corazón del rico, como el bolsillo del mendigo, como los besos de alquiler. Confuso, como una noche sin abrigo, como las frases que ya no te escribo oa´ que vuelvas otra vez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario