Hoy ha salido el sol, está claro, como todas las mañanas, pero yo no veo la luz. Tengo miedo de abrir los ojos, supongo que porque sé que la realidad no puede superar mis sueños. Hoy es uno de esos días en los que la vida se ha echado la siesta y nosotros debemos permanecer despiertos, y a veces es difícil. Duele acumular horas de insomnio, cuesta mantener los ojos abiertos ante la oscuridad, y lo peor es que por mucho que los abras nunca sabes que ahí más allá, porque todo está oscuro. En esos momentos de nuestra vida es en los que más solemos caer, nos cuesta mantenernos de pie cuando no sabemos que hay a nuestro alrededor porque tenemos miedo a abrir los ojos... Lo peor de todo, es que no existen luces suficientes para hacernos entender que lo único que podemos hacer en esos casos es levantarnos caída tras caída y tener cuidado...
"Tienes que ver lo que son los ojos de él. Están en estado de amor puro...¿Usted se imagina lo que debe ser un amor así? Sin el desgaste de lo cotidiano, de lo obligatorio...""¿Cómo hizo para aprender a vivir sin ella?""Ya no sé si es un recuerdo, o el recuerdo de un recuerdo lo que me va quedando."
jueves, 4 de noviembre de 2010
Tapar con tiritas heridas de bala.
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